El pueblo ya cuenta con una macrogranja de porcino.

La laguna de Tordesilos estaría a escasos mil metros de la granja, lo que pondría en peligro la calidad de sus aguas, opinan los ecologistas.

 La localidad molinesa de Tordesilos se convertirá en el municipio de la provincia con más cabezas de porcino en intensivo cuando se ponga en marcha una nueva granja con lo que se llegará a las 4.000 cabezas, según informa Ecologistas en Acción.

Este grupo ecologista presentó alegaciones el pasado mes de abril, donde advertía de la "falta de calidad y rigor" del proyecto presentado por el promotor, y hacía especial mención al "grave daño ambiental" que ocasionaría sobre espacios naturales muy importantes y relevantes, así como a uno de los humedales más característicos de la provincia, la laguna de Tordesilos. La parcela donde se pretende instalar las naves y llevar a cabo la actividad de ganadería industrial, se encuentra en estado de regeneración de sabina rastrera y otros matorrales protegidos como hábitat de interés especial de Castilla-La Mancha. Además, una pequeña parte de la parcela está incluida dentro de la ZEC (Zona de Especial Conservación) “Sabinares rastreros de Alustante-Tordesilos”, en estado de regeneración, y se encuentra a escasos mil metros de la Laguna.

El consumo de agua estimado es de casi 7 millones de litros al año, que se extraerán del acuífero que mantiene la Laguna de Tordesilos, entre otros manantiales y cursos fluviales, informan desde EA. Según el Plan de Gestión de la ZEC “Sabinares Rastreros de Alustante-Tordesilos”, es obligado mantener el nivel de los acuíferos, llegándose a prohibir realizar nuevos pozos dentro del ZEC. En este caso concreto, la Junta aprueba el uso de este pozo, que según EA afecta indirectamente a la Laguna "ocasionando un riesgo grave, poniendo en riesgo la lámina de agua del humedal".

Los ecologistas se temen de que los malos olores por la producción y esparcimiento de los purines lo acabarán pagando vecinos y visitantes. Y critican que el promotor no aportó las parcelas donde se esparcirán los purines, ni el calendario de vertido.

"La nitrificación de las aguas subterráneas podría acarrear serios problemas de potabilidad en un futuro, teniendo en cuenta que el municipio de Tordesilos tendrá que absorber los purines generados por el engorde de más de 10.000 cerdos al año", añaden.

Además, señalan que la Junta ha aprobado un documento que no había previsto ni evaluado las cantidades previstas de generación de metano, amoniaco y dióxido de nitrógeno, que suponen grandes emisiones de gases de efecto invernadero y de amoniaco.

Alberto Mayor, de EA, critica el apoyo económico y político de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha a este modelo de ganadería intensiva por considerar que es "totalmente insostenible, contrario a la conservación de la población en el mundo rural y con graves consecuencias ambientales y sociales, por el ingente consumo de agua, los malos olores, el vertido de purines, o las emisiones de gases de efecto invernadero".