Page arropa a González y Guerra en Madrid con socialistas críticos
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha destacado este miércoles que, en un escenario donde las instituciones del Estado están "demasiado sometidas a tensión", el rey muestre que "tiene las cosas claras y altura de miras".
García-Page se ha reunido durante una hora y media con Felipe VI en el Palacio de la Zarzuela en el marco de la ronda de entrevistas entablada por el monarca con los presidentes autonómicos elegidos en los comicios del pasado 28 de mayo.
En la charla, además de informarle sobre sus principales proyectos para la región, han intercambiado impresiones sobre la situación política nacional, si bien el presidente castellanomanchego no ha desvelado lo comentado con el monarca.
“Cualquier circunstancia se puede interpretar e involucrar a la figura del rey”, lo ha justificado en declaraciones a los medios en el exterior del recinto de la Zarzuela.
No obstante, de Felipe VI ha remarcado: “Es plenamente consciente de su papel institucional y de lo importante que es que una institución funcione con normalidad. Tan demasiado sometidas a tensión todas las instituciones del Estado, de manera que es verdaderamente importante que la Jefatura del Estado tenga las cosas claras y altura de miras”.
El único de los tres presidentes autonómicos del PSOE que gobierna con mayoría absoluta ha señalado que su objetivo durante su tercer mandato es aprovechar la “estabilidad” del Gobierno y de las instituciones de Castilla-La Mancha con el fin de servir de polo para atraer a empresas e inversiones.
“En nuestra región se pueden hacer cuentas más allá de un fin de semana”, ha apuntado el dirigente socialista.
Felipe VI se ha interesado por la situación de los municipios de Castilla-La Mancha afectados por los últimos temporales, en especial, en la provincia de Toledo.
García-Page ha señalado que no se prevé que el rey visite alguno de ellos porque la mayor parte de los sitios afectados “están muy recompuestos”.González y Guerra en primer plano, en segundo plano García- Page en el acto de ayer/ JCCM
No cree que la amnistía esté pactada
Por otro lado, el presidente de Castilla-La Mancha ha arropado este miércoles en Madrid a Alfonso Guerra y a Felipe González en un acto celebrado en la capital de España en el que se han vertido duras críticas contra la posibilidad de que el gobierno de Sánchez apruebe una aministía por exigencia de los partidos separatistas.
Page fue el único presidente regional socialista que asistió al acto en el que sí estuvieron socialistas críticos como el expresidente de Aragón, Javier Lambán; Nicolás Redondo, que acaba de ser expulsado del PSOE, o socialistas históricos como el expresidente extremeño Juan Carlos Rodríguez Ibarra, el expresidente asturiano Javier Fernández y los exministros José Barrionuevo, José Luis Corcuera y Virgilio Zapatero.
El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García Page, ha asegurado este miércoles en Madrid que no se cree que la amnistía para los implicados en el procés esté ya pactada como ha afirmado el líder de ERC, Oriol Junqueras.
Page, contrario a la amnistía que el independentismo catalán exige para investir al socialista Pedro Sánchez, ha acudido este miércoles a la presentación en Madrid del libro del exvicepresidente socialista Alfonso Guerra junto al expresidente del Gobierno Felipe González.
En declaraciones a los medios, el presidente castellano-manchego ha afirmado que no cree que la amnistía esté pactada porque si lo estuviera "se sabría", ya que "en este país eso no duraría ni 24 horas", siguiendo así el desmentido que hace también el Gobierno.
El dirigente socialista, que ha recordado que el PSOE decía antes de las elecciones que la amnistía no es constitucional, ha apuntado además que tiene que creerse al PSOE cuando dice que no está negociando con Junts.
Sin vaticinar posibilidad alguna para el candidato popular, Alberto Núñez Feijóo, Page confía que ante una investidura de Sánchez, "no haya una ley de amnistía como la que se predica, al menos la que dicen los independentistas". Pide que los árboles no "impidan ver el bosque" y que la "investidura de hoy" no impida al PSOE "las investiduras de mañana y de pasado mañana".
De aprobarse una amnistía, expresaría su opinión, aunque, preguntado sobre si dejaría el partido, ha subrayado que lleva en el PSOE "mucho más tiempo de los que toman o van a tomar estas decisiones".
En todo caso, ve bien a los socialistas y cree que el PSOE lograría un mejor resultado en unas elecciones, si bien espera que se hagan "todos los intentos" para evitar una repetición electoral.
Además, percibe ahora un ambiente "más sosegado" en Cataluña donde "se ha desinflamado muchísimo la calle" por muchos factores, también que terminasen en la cárcel.
Y ha dejado una advertencia: "Los independentistas llevan muy mal los abrazos, lo que pasa es que España también lleva bastante mal los abrazos de los independentistas".