El equipo de Gobierno municipal ha visitado hoy las instalaciones de la piscina de verano, donde se ultiman los preparativos para su apertura, prevista para el próximo miércoles día 1 de julio. La prestación del servicio de la piscina cambiará de modo muy notable debido a la nueva normativa sanitaria impuesta con el objetivo de minimizar los posibles contagios por COVID-19, lo cual implica el establecimiento de medidas extraordinarias de higiene y desinfección, control de accesos, del tránsito por la instalación y de la ubicación de las personas usuarias, tanto en la pradera de césped como en los tres vasos disponibles para el baño, que estarán sujetos a un estricto control de aforo y distanciamiento interpersonal.

“Todo esto es posible gracias al trabajo de las concejalías, trabajadores y la administración, que se está esforzando al máximo para encontrar las soluciones necesarias y poder reactivar la actividad en el municipio, siempre sin olvidar las nuevas normas y la prudencia que debe guiarnos en todo lo que hagamos social e individualmente”, ha señalado el alcalde, Rafael Esteban, que relataba el amplio despliegue de medios materiales y humanos que serán necesarios para poner en marcha el servicio “porque entendemos que es, en cierta medida, necesario para armonizar la vida de muchos vecinos y vecinas de Marchamalo en un verano en el que tendrán más complicado el poder irse de vacaciones”.

Para garantizar el cumplimiento de la nueva normativa, además de limitar la venta de entradas a un máximo de 310 personas por turno de apertura (habrá dos, uno de mañana de 11.00 a 15.00 horas y otro de tarde, de 16.00 a 21.00 horas), lo que equivale a aproximadamente un 30% del aforo total de la instalación, se están delimitando los espacios de la pradera mediante elementos físicos y señalética que regule tanto el tránsito de personas como su ubicación en la misma, dividiendo el espacio en parcelas destinadas para el uso de 1, 2 y 4 personas dependiendo de su tamaño. El aforo dentro de los vasos será controlado por los socorristas, habiendo en uno de ellos dos calles reservadas para el nado deportivo.

Habrá disponibles 109 parcelas

Debido a todo esto, también cambiarán los precios de acceso a la instalación, que ya no se abonarán por persona, sino por reserva de parcela, existiendo la posibilidad de realizar la misma de forma anticipada entre 7 y 1 día antes de la fecha elegida, comenzando la misma este martes, 30 de junio (posibilidad disponible solo para personas empadronadas en Marchamalo). Las parcelas que queden disponibles en cada día de apertura de la instalación serán de venta libre, aunque a un precio diferente al de la venta anticipada.

En total habrá disponibles 109 parcelas (48 para 4 personas, 54 para 2 personas, y 10 para 1 persona), realizándose la venta de las mismas en la taquilla de la piscina, la cual también cambia de ubicación. Este año el acceso a la piscina será por el bar, donde estará la taquilla, priorizando siempre la reserva anticipada de parcelas, cuyos precios varían en función del tamaño, del turno escogido (mañana o tarde) y de si la misma ha sido reservada con antelación previo pago o en el mismo día en el que se solicita su uso.

Lo que finalmente pagará el usuario oscila desde los 1,5 euros de una parcela individual en turno de mañana con reserva previa, hasta los 12 euros de una parcela para 4 personas comparada en el mismo día para el turno de tarde en fin de semana.