Este grupo madrileño de música tradicional, presentó su nuevo disco, Viaje entretenido, en Tamajón. La capital serrana fue una de las paradas de su original gira, al más puro estilo titiritero, con la que están recorriendo el camino que une Hita y Segovia y con la que evocan el Libro de Buen Amor, del Arcipreste de Hita, que ha inspirado su trabajo.

 El grupo de música tradicional La Bojiganga presenta en estos días su nuevo disco, Viaje entretenido, en una original gira, al más puro estilo titiritero, en la que evoca el Libro de Buen Amor, escrito por Juan Ruiz, el Arcipreste de Hita.

Los siete músicos del grupo, con dos borricos en cuyos serones viajan flauta, zanfona, el acordeón, el tambor de cuerdas, el saxofón y todos instrumentos con los que enriquecen los sones tradicionales (también utilizan una furgoneta de apoyo) que investigan aquí y allá, pero sobre todo en el centro de España, y después interpretan, comenzaron el viernes su itinerario precisamente en Hita.

El sábado actuaron en Cogolludo, y ayer lo hicieron en Tamajón. El Ayuntamiento les abrió de par en par el Centro Social para que pudieran hacer en el pueblo una de las escalas de este “viaje romántico”, como lo define Ismael Clemente uno de los integrantes de La Bojiganga y tocar su música. Asimismo el Consistorio les proporcionó todo aquello que necesitaron para acomodarse y pasar la noche. A cambio, los músicos hicieron un concierto íntimo, pero inolvidable.

La etapa de hoy concluye en Retiendas, donde de nuevo van a actuar para el pueblo, de forma gratuita, como están haciendo en todas aquellas localidades en las que acaba su ruta diaria. En total este viaje entretenido tiene doscientos kilómetros. Después de Retiendas continuará por Valdepeñas de la Sierra, La Cabrera, Patones, el Cuadrón y Oteruelo del Valle. Cruzará la sierra de Guadarrama por los montes carpetanos, entrando en la provincia de Segovia por Sotosalbos. La gira acabará a los pies del Acueducto de Segovia el día 9 de junio, ciudad en la que harán un último concierto callejero.

El viaje entretenido recorre lugares que aparecen en el Libro de Buen Amor, como El Vado (pueblo que se tragó el pantano, aunque mantiene  las ruinas de su iglesia) , el Monasterio de Bonaval o el Puerto de Malagosto. “Hemos unido estos puntos principales utilizando caminos de herradura medievales en unos casos y pistas de concentración parcelaria en otros, sin ninguna pretensión más que la de hacer un viaje farandulero o circense, y de paso recordar el libro pseudoautobiográfico y a su autor, un clérigo especialísimo que de alguna manera ha inspirado nuestro disco”, añade Ismael. Hay varios escritores que han publicado libros sobre el viaje del Libro de Buen Amor, como Antonio Herrera Casado, Manuel Criado del Val o Guillermo García, “pero no teníamos constancia de que nadie hubiese andado la ruta, por lo que intentamos, siempre sin ánimo de dogmatizar, acercarnos de esta manera al texto”.

La Bojiganga tiene su epicentro en el madrileño Valle de Lozoya. Su repertorio abarca músicas tradicionales de Galicia, de Cantabria o Extremadura, pero sobre todo del centro de la península, y de Madrid, “que parece no tener raíces, o tenerlas soterradas por su capitalidad, aunque sean tantas como las de Segovia o Guadalajara”, afirma Ismael.

En el Centro Social de Tamajón, La Bojiganga recordó al Tío Zapatones, de Guijuelo, en Salamanca, dedicándole a su memoria la misma pieza que el utilizaba para darle la magia a sus salchichones, o la vecindad serrana de Guadalajara y Madrid, interpretando Las dudas de San José, una canción originaria de Montejo de la Sierra, recordando, de paso, la querencia de La Bojiganga por las tierras de Guadalajara.

Los músicos llevan el viaje “con orgullo”, bromea Clemente, y duermen en las viejas escuelas de los pueblos, “o donde nos dejan”. La sierra se está portando “de maravilla con nosotros, por eso se lo correspondemos con un concierto”.

El alcalde de Tamajón, Eugenio Esteban, agradeció a los músicos su esfuerzo, les felicitó por la realización de este viaje romántico, al tiempo que se sumó a la idea de recuperar al Arcipreste de Hita y su Libro de Buen Amor como activo cultural y turístico para la comarca. “Hemos aprovechado la visita de La Bojiganga para iniciar con el grupo nuevos proyectos”, afirma el regidor.