No es necesario irse a los valles pirenaicos o asturianos para poder disfrutar de un trepidante descenso por aguas bravas. En el Parque Natural del Alto Tajo, entre Zaorejas y Peñalén, hay varios tramos en los que se puede ver, durante todos los fines de semana con buen tiempo, a decenas de palistas bajando el río con balsas y piraguas. En la ruta siguiente vamos a viajar entre estos dos pueblos por el camino más corto, una pista forestal de unos 25 kilómetros, que va bordeando el río entre espectaculares barrancos y cortados. Como premio, el refrescante baño en alguna playa natural, de arena finísima. Por SANTIAGO BARRA