Los jóvenes del lugar este domingo en el Tajo recordando el viejo oficio de ganchero. Fotos: GD.Un año más, los municipios del Alto Tajo celebraron su Fiesta Ganchera, que recuerda las maderadas que bajaban por el Tajo hasta Aranjuez.
Peñalén ha sido el pueblo elegido para celebrar la Fiesta Ganchera de la que cada año se encarga los municipios que forman parte de la Asociación de Municipios Gancheros del Alto Tajo, de la que además del pueblo citado forman parte Zaorejas, Taravilla, Poveda y Peralejos de las Truchas. El personal se da cita en la plaza del pueblo y allí se toma el desayuno ganchero, que como rezan los cánones seo componía de aguardiente de orujo alcarreño y rosquillas. Después, todo el mundo y al son de la dulzaina se baja hasta el río para tirar los troncos previamente cortados. Los más intrépidos se suben en ellos y tratan de manejarse sin caerse al río, cosa que no es fácil, y para lo cual los gancheros se servían de una vara larga con un gancho en la punta. Por último, se sacarán los troncos del río con la ayuda de las caballerías, como también se hacía.
Las maderadas del Tajo trancurrían entre Peralejos hasta Aranjuez, incluso hasta Talavera llegaban algunas, y se mantuvieron hasta la construcción de los embalses de Entrepeñas y Buendía. Entonces era la mejor manera de trasladar los troncos hasta el aserradero por unos parajes, el Alto Tajo, que carecían de carreteras para el viaje en camiones. Ese pastoreo de los troncos era un oficio duro y arriesgado, el de ganchero, que en contra de lo que se piensa no lo practicaban los lugareños del Alto Tajo sino tipos corajudos que venían desde pueblos de Valencia, como Chilla. En muchos casos, el oficio iba pasando de padres a hijos, y su misión era transportar con grandes penalidades una maderada formada por millares de troncos que llegaban a tapar durante varios kilómetros el cauce del Tajo, como nos relata José Luis Sanpedro en su maravilloso libro “El río que nos lleva”.
A la fiesta asistieron centenares de vecinos de la comarca. Hubo también políticos siguiendo el evento como la consejera de Fomento, Elena de la Cruz, el delegado de la Junta Alberto Rojo, la vicepresienta de la Diputación Ana Guarinos o el diputado regional Lorenzo Robisco
