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Los conductores de los autobuses urbanos amenazan con ir a la huelga

170921 Alsa GuadalajaraPiden que se desbloquee la negociación de su convenio colectivo que está en standby tras cuatro reuniones con la empresa

El comité de empresa de ALSA-Guadalajara, concesionaria del servicio de autobuses urbanos de Guadalajara capital desde 2013, convocará movilizaciones si el próximo martes no se desbloquea la negociación de su convenio colectivo, un convenio que fue denunciado a finales de año y cuya renovación parece “inalcanzable”.

Según Rafael Aguirre, presidente del Comité de Empresa de ALSA- Guadalajara, las negociaciones se iniciaron en abril de este año y a pesar de que se han mantenido cuatro reuniones con la dirección no se ha avanzado absolutamente nada. “no acepta ninguna de las propuestas del comité, ni en materia salarial, ni sobre la jornada laboral, los festivos, las ratios de personal, las categorías y la asignación de vehículos; ni sobre los trabajadores con contratos precarios; ni siquiera sobre la ropa de trabajo o los baños autolimpiables para que las conductoras y los conductores puedan hacer sus necesidades dignamente”- señala Aguirre.

El pasado miércoles los 91 trabajadores de la empresa fueron convocados a una asamblea, a ella acudieron 75 empleados que decidieron convocar movilizaciones si en la reunión que tienen prevista para el martes con la dirección de la empresa, no hay ningún avance.

"Nosotros no queremos perjudicar al Ayuntamiento, ni perjudicar a los usuarios del autobús- señala Rafael Aguirre- pero queremos soluciones".

170922 Cte empresa ALSA-GuadalajaraComité de empresa de ALSA GuadalajaraSus reivindicaciones

Según denuncian desde el comité de empresa llevan con el sueldo congelado desde el año 2012. Los trabajadores piden una subida salarial del tres por ciento para este año y los dos siguientes, más otro medio punto para compensar el cero por ciento que tuvieron en 2016. Por su parte ALSA sólo ofrece un incremento anual del 0,5 por ciento y además vinculado a unas condiciones que los empleados creen que son imposibles de cumplir relacionadas con las bajas por enfermedad y los accidentes de los autobuses.

Desde el comité aseguran que la plantilla se siente acosada por la política que lleva la empresa en las bajas médicas. Según el presidente antes se les pagaba el cien por cien del salario cuando había alguna enfermedad laboral (por ejemplo una gripe) y ahora eso ha cambiado "sólo en un caso muy grave se mantiene el salario. Ya se ha denunciado en los juzgados y algunos han dado la razón a los trabajadores".

Además la plantilla se queja de la política de expedientes que tiene ALSA hacia los trabajadores en caso de accidente. "Hay situaciones- señala Rafael Aguirre- que se sanciona con retirada de empleo y sueldo en accidentes en los que el conductor no es responsable".

Si no hay avances en la reunión del martes el comité volverá a reunir a la asamblea de trabajadores para acordar y planificar las movilizaciones a llevar a cabo.

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