Un Tenorio Mendocino más vivo que nunca

 

Por primera vez en muchos años he podido presenciar, como espectador, en su totalidad, la representación del Tenorio Mendocino, un evento en continuo crecimiento que ya está arraigado en las tradiciones de nuestra ciudad alrededor de la festividad  de todos los Santos. Esperando la última representación en el Liceo Caracense, coincidí en la grada instalada con un grupo de jóvenes, varias de ellas de Guadalajara y una de ellas de Fuenlabrada, que era la primera vez que venía a nuestra ciudad y que no paraba de preguntar. La conversación que mantenían se debatía entre la ciudad madrileña, que al parecer tiene una gran oferta cultural y en contraste nuestras jóvenes decían que “Guadalajara no tenía nada”. Tercié en la conversación y les intenté abrir los ojos hablando de otras muchas cosas sobre nuestra ciudad de las que podamos sentirnos orgullosos. Fue una conversación muy amena e interesante. Guadalajara ha sido una ciudad que ha tenido etapas brillantes en su historia, de mucho esplendor, en los que el desarrollo económico arrastró un dinamismo cultural,  pero desgraciadamente nuestro patrimonio ha sufrido un continuo deterioro, como nos recuerda siempre que tiene la ocasión nuestro pertinaz historiador Pedro José Pradillo.

 

Tenorio20221El Tenorio es una muestra viva de la sociedad civil de Guadalajara. En la foto, una parte de los que trabajan con altruismo para que se pueda celebrar./GUDiario.

Me venía a la mente la reciente visita a la ciudad de Roma, que he tenido el privilegio de compartir en compañía de un maravilloso grupo de personas, al frente de los que se encontraba nuestro Vicario Agustín Bujeda, una auténtica eminencia y libro abierto sobre la ciudad italiana. Roma también tuvo una gran pujanza cultural y económica, llegando a ser el epicentro de un imperior. En la actualidad conserva una gran riqueza artística, como ninguna otra ciudad del mundo, pero también hubo un momento de la historia en la que le llegó la decadencia y comenzó a destruirlo todo. El Foro Romano es una pequeña muestra de lo que llegó a ser y todo lo que se arrasó.

Amigas guadalajareñas: Guadalajara tiene sitios interesantes,  que afortunadamente todavía podemos enseñar. El sábado que tengáis tiempo acercaros por la oficina de turismo que os llevarán por algunos de ellos, pero lo que sí podéis alardear es de tener eventos como el Tenorio Mendocino , que han nacido de la sociedad civil arriacense y que ya son patrimonio inmaterial de nuestra ciudad.

Recuerdo todavía cuando hace ya tres decenas de años Javier Borobia y Josefina Martínez se presentaron en el despacho del Ayuntamiento, en el que me encontraba trabajando junto a mi compañero y maestro Paco Olmeda, pidiendo un poco de ayuda para poner en marcha una idea loca que se les había ocurrido y que era la de representar el Don Juan Tenorio de José Zorrilla por las calles y plazas de Guadalajara. La ayuda, poquito a poco llegó y el Tenorio Mendocino fue creciendo, año tras año, merced al entusiasmo de un cada vez más nutrido grupo de personas, que de una manera altruista se involucraron en un bonito proyecto. Dirigido por el sabio timón de Javier Borobia, el Tenorio Mendocino fue creciendo, no sin superar momentos difíciles y penurias, en los que hasta el propio Javier tuvo que arriesgar parte de su patrimonio personal. Nació entonces Gentes de Guadalajara porque la dimensión del proyecto así lo requería y se consiguió involucrar a tanta gente que ya fue imparable.

El domingo, cuando saludé a Josefina Martínez -la única actriz que ha perdurado todos estos años desde sus inicios- después de despedirse del Tenorio Mendocino, me preguntaba con tristeza y congojo: ¿era el momento de dejarlo ya, o no…..? No la pude responder, porque la emoción también se apoderó de mis palabras, pero ahora sí puedo hacerlo. El Tenorio ya no será lo mismo sin Josefina Martínez, como tampoco lo fue cuando Javier Borobia tuvo que dejarlo, pero el cuerpo es el que manda y los dos podéis sentiros orgullosos, porque habéis sabido dejar el camino marcado para que el Tenorio siga cada vez más vivo. Las personas importantes lo son por lo que hacen, pero todavía lo son más por el legado que dejan. El Tenorio Mendocino ha superado ya situaciones complicadas y actualmente, bajo la presidencia de Felipe Sanz, que también me anunció su próximo relevo, se encuentra en su mejor momento, con una legión de casi trescientas  personas comprometidas que de una manera totalmente altruista dedican parte de su tiempo libre a engrandecer un acontecimiento que ha calado en nuestra ciudad. El gran secreto de Gentes de Guadalajara está en que junto a los veteranos hay un gran grupo de jóvenes entusiastas que se han envenenado con el proyecto, que ahora tiene otras ramificaciones a lo largo del año.

Tenorio2022En primer plano, Josefina Martínez, que hasta esta edición ha representado el papel de Doña Brígida. /GUDiario.

Todos los alcaldes, desde José Mª Bris, pasando por Jesús Alique y Antonio Román, han estado a la altura de las circunstancias apoyando esta iniciativa popular y contagiando a otras instituciones. El actual alcalde Alberto Rojo no podía ser menos y ha dado el definitivo empujón para que el Tenorio Mendocino pueda desterrar definitivamente las penurias y acceder a nuevas tecnologías, que ya serán imprescindibles en el futuro.

El Tenorio Mendocino, al igual que el otro gran evento, ya arraigado en Guadalajara, como es el Maratón de los Cuentos, que un día inventó Blanca Calvo, son dos acontecimientos nacidos de una bella locura de sus creadores, pero que al involucrar a tanta gente que lo siente como suyo, forman parte del patrimonio inmaterial de nuestra ciudad.

Josefina Martínez, Blanca Calvo y Javier Borobia, que sigue vivo, como nos recordó Jesús Orea en la presentación de su último poemario, son algunas de esas personas que han dedicado altruistamente mucho tiempo y esfuerzos de su vida a engrandecer las tradiciones y el sentimiento de esta ciudad que algún día se lo reconocerá.

Amigas guadalajareñas. Por todos los sitios donde voy llevo la bandera de Guadalajara y presumo de ello. Buscar siempre lo que nos caracteriza y enorgulleceros de eso, porque en Guadalajara también tenemos cosas que mostrar. Aunque ojalá que en los tiempos que quedan por llegar puedan salir más proyectos como el Tenorio Mendocino o el Maratón de Cuentos, que engrandecen una ciudad y acaban siendo señas de su identidad.

 

Luis Alfonso Barra Toquero

 

Luis Barra ha sido funcionario del Ayuntamiento de Guadalajara durante casi cuarenta años, treinta de los últimos prestando sus servicios en el Departamento de Protocolo y Festejos.

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