Desde el martes 1 de junio, la factura de la luz , esa especie de jeroglífico, indescifrable para la mayoría de los millones de los usuarios españoles, que no sabemos interpretar qué es lo que pagamos, pero sí lo que pagamos, una de las energías más caras de toda la Unión Europea, ha sufrido algunos cambios. Preocupado por lo que supone para nuestras economías, he tratado de analizarla , conocerla y tratar de explicarla.
Según dicen, los cambios van dirigidos a la mejora de la eficacia energética, considerando tres tramos , en los horarios y en los días de la semana en los que el precio del Kw/hora , será variable, y más barato en aquellos en que la demanda de la energía sea menor, porque las compañías eléctricas dicen que es en los que a ellos les cuesta menos la producción. Los tres tramos en los que se aplican las tarifas son los siguientes.
Los españoles gastamos en energía unos 40.000 millones de euros, siendo la Hacienda pública la más beneficiada, ya que es la perceptora de los impuestos que ascienden a 10.500 millones de euros y de los peajes, 13.500 millones de euros, mientras que el coste de energía que consumimos solo son 16.000 millones de euros.
El mas caro, “la hora Punta” de lunes a viernes de 10 a 14 horas y de 18 a 22 horas ; le sigue “la hora Llano”, esos mismos días de 8 a 10 horas , de 14 a 18 horas y de 22 a 00 horas; y la tercera, la más económica “la hora Valle”, de 00 horas a 8,00 horas los días laborables y las 24 horas de los sábados , domingos y días festivos.
Estas serán las tarifas a aplicar para los 19 millones de usuarios (cifras del mercado) , que anteriormente tenían un contrato sin discriminación horaria y que con esta nueva fórmula, si la utilizan en la hora “Llano” y sobre todo en la “Punta”, podrían llegar a pagar en la factura de la luz una media de un 6,7% menos y para los 11 millones de usuarios (cifras del mercado) que ya tenían el contrato con discriminación horaria, con 14 horas al día más barata desde las 23 horas a las 13 horas del día siguiente para los que el cambio les supondría pagar en la factura una media de dos euros más al mes.
Solo el 31% del recibo corresponde a la energía consumida
Ya tenemos el contrato de luz: recibimos la factura y del total, solo el 31 % corresponde al pago de la energía consumida .El resto del coste de la misma se reparte de la manera siguiente: un 21 % al IVA , uno de los más altos de Europa , en el Reino Unido es del 5% , en Francia del 5,5% , del 6% en Grecia y Portugal , del 8% en Luxemburgo , del 10% en Italia , del 13,5%, en Irlanda , en Alemania del 19%,… A este impuesto, en España, hay que añadirle el especifico de electricidad, del 5,11% , un impuesto especial como puede ser el de las bebidas alcohólicas , el tabaco o la gasolina. El Gobierno acaba de anunciar que el IVA podría rebajarse al 10% y eso llevaría a una importante bajada en el coste de la luz; esperamos que pronto se convierta ese buen propósito en realidad.
Un peaje del 40%
Además de estos impuestos, la factura incluye también el el gasto que llaman de “peaje”, que asciende a un 40 % de la misma; del total de este gasto, un 41% se dedica a incentivar e impulsar las energías renovables , otro porcentaje igual al pago y mantenimiento de las redes de distribución y el resto a la deuda acumulada por el déficit del sistema, la variación del precio del petróleo y al alquiler de los contadores de luz .
Por lo tanto, al usuario le interesa - para rebajar su factura, aparte de poder utilizar la energía eléctrica en los tramos horarios y en los días en que es más barata-, conocer lo que puede hacer para aminorar el gasto de los aparatos eléctricos que tiene en el hogar y para ello saber el gasto de energía que consume cada uno de ellos.
Así tenemos que el electrodoméstico que más gasta es el frigorífico, consumo que puede llegar al 30% del total; le sigue el televisor, con un 12,2%, las bombillas y aparatos de iluminación un 12% , la lavadora el 11,5% , la cocina eléctrica el 10%, el horno el 8,3% , el ordenador el 7,7% , el lavavajillas el 6,1% y el 2,2% al resto de aparatos como microondas , secadores de pelo,… .
En resumen: en España hay 40 millones de usuarios de la luz , con una media de gasto por usuario de mil euros. Es decir, el gasto de esa energía alcanza los 40.000 millones de euros , siendo la hacienda pública la más beneficiada ya que es la perceptora de los impuestos que ascienden a 10.500 millones de euros y de los peajes 13.500 millones de euros , mientras que el coste de energía que consumimos es de 16.000 millones de euros.
La bajada del IVA del 21% al 10% , supondría para el usuario una bajada en la factura de la luz de un 11%.
Jose Maria Bris Gallego.
