El domingo 23 de septiembre tuve la satisfacción de asistir a la consagración de la iglesia de El Salvador , erigida en una parcela al comienzo de Aguas Vivas , que el ayuntamiento que yo presidia cedió al obispado durante mi último mandato como alcalde (1999-2003), para tal fin.
Una iglesia que hoy es una auténtica y hermosa realidad debida a la perseverancia de su párroco don Jesús Mercado , con el apoyo de los obispos don José Sánchez y don Atilano Rodríguez y de los vicarios don Eugenio Abad y don Agustín Bugeda.
La construcción de la parroquia de El Salvador ha tenido tres fechas significativas, la del 23 de septiembre de 2007 en que se celebró la primera misa, la del 22 de septiembre de 2013 en que se inauguró y la del 23 de septiembre de este año en que una vez concluido el altar mayor se llevó a cabo su consagración. Destacando otra fecha muy importante para la historia de la parroquia, la del 26 de abril, también de este año, en la que se inauguró el espectacular mosaico que cubre el fondo del mencionado altar.
Ese día, el autor del mosaico, el jesuita- sacerdote Marco Ivan Rupnik, estuvo en Guadalajara y explico la simbología del mismo , que guardando las distancias , según me comentaba nuestro cronista provincial Antonio Herrera Casado, era como si Miguel Ángel en su época hubiera explicado la simbología de la Capilla Cristina del Palacio Vaticano.
Ivan Marco Rupnik nació en Idrija (Eslovenia) , tiene 63 años de edad y actualmente, nombrado por Juan Pablo II , es el director del Taller de Arte Espiritual del Centro Alleti de Roma , un taller dependiente del Vaticano donde un grupo de artistas cristianos , de 19 nacionalidades, uno de ellos español que nos dirigió unas breves palabras durante la consagración, trabajan juntos para la realización de estos mosaicos que unen la tradición iconográfica de las iglesias de oriente y occidente.
Un mosaico de estilo bizantino, hecho con cientos de miles de piedras y losetas de variadas estructuras y colores que embellece la iglesia y que enriquece el patrimonio religioso y cultural de nuestra ciudad, que se une con él a otros importantes templos que tienen obras de este mismo autor: en España los de la catedral de la Almudena de Madrid, también en la capital en el Hospital de la Beata María de Jesús , en la capilla de la Conferencia Episcopal Española y en la de la Universidad de San Pablo y en otros lugares como Betanzos , Gijón , Tenerife , Plasencia y Zaragoza. También los mosaicos de Rupnik que pueden contemplarse en las basílicas de Fátima y de Lourdes .
El mosaico de la Iglesia de El Salvador de Guadalajara destaca por su luminosidad y según explicó el propio Rupnik en su presentación, tiene cuatro escenas principales: la del centro con la figura de Jesús con un cordero sobre los hombros, acompañado de la Virgen María y de San Juan Bautista; a su derecha, la de la Sagrada Familia;, a la izquierda, San Pedro con un saco de red llena de peces al hombro; y al fondo de la derecha una concesión del artista a la ciudad de Guadalajara, en la que se contemplan las aguas de un río (Aguas Vivas). El mismo Rupnik se refería al significado del nombre de Guadalajara (río de piedras) y sobre las aguas la escena bíblica de Moisés “entregado por las aguas” del Nilo y recogido por la hija del faraón.
En fin, un día histórico para nuestra ciudad, y de agradecimiento y satisfacción para un sacerdote, don Jesús Mercado, que con una tenacidad y un trabajo que me recordaban los que don Justo Sanz tuvo hace años hasta que vio terminada la Iglesia de San José Obrero, del barrio de Los Manantiales. Contando con la ayuda del obispado y la colaboración de muchos feligreses, ha conseguido con esta singular parroquia enriquecer el patrimonio religioso y cultural de nuestra ciudad.
Josè Maria Bris Gallego.
26-9-2018.