Hasta el lunes 15, cuando la grada ya estaba montada, no hubo ningún contacto entre el Club y el ayuntamiento para organizar nada
El concejal de Urbanismo, Alfonso Esteban, junto a las dos técnicos de urbanismo/ Gu Diario
No hubo ninguna reunión previa entre el Club y el Ayuntamiento de Guadalajara para organizar el partido contra el Barça, una falta de contacto que podría haber sido la causa de todos los problemas que se desencadenaron en las horas previas al partido de la Copa del Rey y que terminó con el retraso del inicio del encuentro.
Hoy el concejal de Urbanismo de Guadalajara, Alfonso Esteban, acompañado de dos técnicas de urbanismo, ha querido despejar todas las dudas que hay en torno a este tema. Ha explicado que el lunes 15 supieron que se estaba montando una grada supletoria en el campo y, como no habían pedido ninguna licencia, que es obligatoria; fueron a hacer una inspección. De esa inspección se levantó un acta que tiene dos caminos según marca la ley: por un lado, regularizar esa situación y por otro iniciar un expediente sancionador. Y eso es lo que se ha hecho porque si no lo hicieran, técnicos y políticos, estarían prevaricando.
Esteban ha defendido, con razón, el trabajo impecable de los funcionarios que en un tiempo récord (todos los papeles llegaron a las 7 menos cuarto de la tarde del día del partido) y fuera de su horario de trabajo, solucionaron un asunto que podría haberse convertido en un problema de orden público si 2.000 personas se quedan fuera del estadio porque la grada no contaba con los permisos obligatorios.
Ningún contacto hasta el día 15
Pero el gran problema que llevó a esta situación estuvo en los días previos. Los medios de comunicación hemos preguntado en repetidas ocasiones, si entre el día 9, jornada en la que se hizo el sorteo de la Copa del Rey; y el día 15, cuando se sabe que se está montando una grada y se hace una inspección; se había mantenido alguna reunión entre el CD Guadalajara y el ayuntamiento de la ciudad para organizar el partido. Aunque el concejal ha dado varios rodeos, ha acabado reconociendo que “al menos en urbanismo, no”. En cuanto a seguridad, el Club participó en la reunión del lunes 15 aunque hubo otras con anterioridad.
Según se desprende de sus respuestas ni el Club se puso en contacto con el ayuntamiento para explicarle lo que iba a hacer, ni el Ayuntamiento les llamó para preguntarles y ofrecerse por si necesitaban algo. De esta manera el club tomó decisiones por su cuenta, como instalar gradas, sin tener potestad para ello.
Una falta de contacto inexplicable cuando las dos partes tenían el máximo interés en que el encuentro saliera bien tanto por la imagen del club como por la imagen de la ciudad y que derivó en el problema que ya conocemos y que terminó dando una visión de la ciudad cuando menos cuestionable.
Como no puede ser de otra manera, porque así lo marca la ley, el expediente sancionador está abierto y seguirá adelante aunque ahora el club tiene un plazo para presentar las alegaciones que considere convenientes.