Hoy se analiza en la Audiencia Provincial de Guadalajara la prueba pericial del crimen de la familia brasileña ocurrido en 2016

Los dos forenses que hicieron las autopsias han dado las claves en la sesión de esta mañana/ Gu Diario

Marcos Campos, su esposa Janaina y sus dos hijos, de 4 y 2 años, murieron desangrados. Así lo han confirmado los dos forenses de Guadalajara que realizaron los informes definitivos sobre la muerte de la familia brasileña en un chalé de Pioz, muerte de que la que se ha confesado autor de los hechos Patrick Nogueira, sobrino de los adultos fallecidos y primo de los dos niños.

Según la autopsia, el cuerpo de Marcos presentaba 14 heridas en el cuello pero una de ellas fue la que mató. Además tenía tres heridas en el dorso de la mano izquierda. En el caso de Janaina tenía ocho heridas y dos de ellas fueron las que le causaron la muerte. Una que la atravesaba el cuello de lado a lado en la parte delantera , y una lateral que llegó hasta el hueso. En el caso de los niños tenían dos heridas muy profundas cada uno también en el cuello. Los cuatro murieron desangrados, con un arma que tenía al menos 3 centímetros de ancho, y en un tiempo relativamente corto aunque los forenses no han podido precisar cuánto.

Sobre el desmembramiento de los cuerpos han señalado que se realizó con un cuchillo muy afilado y no se descarta que hubiera utilizado el mismo arma que para asesinarlos pero no se puede confirmar ya que el arma no ha sido encontrada.

Los peritos también han confirmado que Patrick es el autor de los asesinatos ya que su perfil genético aparece en diversos lugares de la vivienda y también en la cinta americana y en las bolsas donde estaban los cadáveres.

Los adultos no se defendieron

La defensa a través de sus preguntas ha querido demostrar que los adultos se defendieron del ataque de Patrick algo que ha quedado totalmente desmontado. Uno de los forenses que realizó la autopsia ha señalado que si las heridas que tenía Marcos en las manos fueran defensivas estarían en la palma y no en el dorso de la mano, “si hubo defensa fue mínima”- ha rematado. Respecto a Janaina uno de los peritos de criminalística ha señalado que el estudio muestra que “el agresor estaba detrás o al lado derecho” pero no de frente.

Está previsto que en esta mañana declaren también los médicos forenses que determinarán el estado mental del acusado, unas declaraciones en las que la defensa basa todos sus argumentos para demostrar que su cliente tiene un problema que le impide actuar de forma correcta.