Su cuerpo se halló a 300 metros de la entreda de la cueva. 

Entrada a la cueva donde falleció el guardia civil./Captura CLMMedia

 El guardia civil que falleció el sábado en una cueva de Poveda de la Sierra, practicando espeleobuceo, era una agente experimentado y que estaba en el 2º curso curso del GEAS, la Unidad de Actividades Subacuáticas que precisamente llevó a cabo las tareas de rescate.

El cadáver de Sergio Cuevas Alonso, de 45 años de edad, fue hallado a las 02:45 horas de la madrugada del domingo a unos 400 metros de la entrada de la cueva “Fuentenavina”, en el t.m. de Poveda de la Sierra, en el Alto Tajo,  según informa la Asociación Profesional Justicia Guardia Civil. De allí se le traslado al Instituto Anatómico Forense de Guadalajara. El Guardia Civil, que no estaba de servicio, y había entrado en la cueva sin compañía, llevaba 4 botellas y había dejado dos de seguridad de mezcla, (nitros). Según los primeros indicios le falló la guía de vida (sistema de sujeción).

La cueva tiene unos 750 metros y 44 de profundidad y se le encontro a 400 metros de la salida. Llevaba un traje de neopreno semiseco y el agua estaba a unos 11/12 grados. La visibilidad no era mala pero la cueva tiene una gatera y los pasos son estrechos.

Intervinieron 7 guardias de Valdemoro, donde estudiaba, y 2 de Valladolid especializados en espeleobuceo, con el apoyo de 4 GEAS de Cuenca, seguridad ciudadana, tráfico y bomberos dee Molina.