10 pasan a ser personal fijo del ayuntamiento
Era un conflicto laboral que se arrastraba desde hace muchos años. Los socorristas y monitores de las piscinas municipales de Guadalajara reivindicaban una estabilidad laboral. Hasta el momento, cada año se realizaban contratos de carácter discontinuo y parcial. Pese a la continuidad tenían que compaginar su vida laboral con otros trabajos. "Aunque está bien pagado, no te da para vivir. Era un encaje de bolillos y ha sido duro”, aseguraba Isidro Contreras, socorrista y representante del sindicato CC.OO.
El alcalde Alberto Rojo aseguraba que “era además una contradicción que teniendo trabajadores y trabajadoras a tiempo parcial se contratase a monitores externos para cubrir las actividades que se querían llevar a cabo mientras se tenía a personal municipal que podía estar a tiempo completo”.