El joven de 25 años, que murió tras haber intentado  perpetrar un atraco a mano armada en una nave de Cabanillas,  recibió un balazo en la espalda. Un guardia civil ha sido imputado por un presunto delito de "homicidio imprudente".

 La autopsia ha confirmado, según ha revelado la agencia Efe, que el joven atracador que murió el pasado 23 de octubre en Cabanillas, recibió un balazo en la espalda y que la causa de la muerte fue la pérdida masiva de sangre. El 11 de diciembre tendrá que declarar en el juzgado número 2 de Guadalajara el guardia civil  que hizo los disparos. Lo hará en condición de imputado acusado de  un presunto delito de "homicido imprudente". Aunque hay testigos que confirman que uno de los atracadores disparo al aire en el interior de la fábrica una escopeta de cañones recortados, no se ha encontrado ningún arma en el barranco donde cayó el joven atracador.

Ni la Delegación del Gobierno ni ninguna otra fuente oficial informó entonces de qué murió el atracador de Cabanillas, y se limitaron a hablar de que cayó por un barranco. Sin embargo, fuentes de la Guardia Civil sí confirmaron entronces a GuadalajaraDiario que "hubo un enfrentamiento" con los atracadores y que había 1 muerto y 1 detenido, sin más precisiones. Ese mismo día se detuvo a otro de los atracadores, mientras que el tercero de ellos, hermano del detenido, se entregó voluntariamente unos días después y luego fue puesto en libertad provisional por el juez encargado del caso.