
Hoy les hablamos de un destino justamente al lado de la provincia de Guadalajara, en la Alcarria conquense, y en las inmediaciones del pantano de Buendía, el más grande de la cabecera del Tajo.
La ruta es una senda circular de 2,5 km. , con vistas al pantano de Buendía,que se puede recorrer con la familia./GUDiario.
Hasta Buendía llegaríamos por la carretera autonómica que sale desde Sacedón y antes aprovecharemos para echar un vistazo al embalse de Entrepeñas para tener un mirada en conjunto de la cabecera del Tajo.
La carretera hasta Buendía es muy atractiva en primavera en que nuestra Alcarria adquiere un aire a lo Provenza francesa o a la Toscana italiana, con una multitud de colores y florecillas; y en verano por las refrescantes aguas de la cabecera del Tajo.Tanto en Entrepeñas como Buendía hay playas aptas para el baño, aunque no podemos descuidarnos porque un pantano no es una piscina.
rutadelascaras.comPodemos optar por dar un paseo a través del pueblo de Buendía, el antiguo Fuentesaúco, que tiene un trazado medieval muy interesante, con una plaza robusta y espaciosa con un soportal de cinco arcos y varios lienzos de la muralla, puertas y torreones por todo el pueblo. Tiene infraestructura turística, con restaurantes y casas rurales, y museos.
Desde Buendía nos indicarán la pista hacia las caras que está señalada, y en buen estado, aun siendo de tierra, con poco más de 9 km. Llegaremos hasta un aparcamiento donde se puede dejar el coche y a partir de ahí iniciaremos el recorrido a pie por una senda con vistas al pantano de Buendía.El acceso es gratis y está siempre abierto.
Las Caras de Buendía es un paraje natural que discurre entre un frondoso pinar, al estilo de los que tenemos en la vecina Guadalajara. Pero es también una zona con rocas areniscas, lo que desde 1992 permitió a dos escultores, Eulogio Reguillo y Jorge J. Maldonado, ir esculpiendo enormes caras de 1 y 6 metros de altura en la roca, al principio con aire oriental. Con el paso de los años se fue agrandando la colección hasta convertirse en una veintena y más representativa del lugar.
El recorrido de 2,5 km. es circular, con una inclinación no superior a los 50 m., no entraña dificultad, por lo que puede ser realizado en un ambiente familiar.
Cuentan en el pueblo que el nombre de Ruta de las Caras tiene su origen en los primeros años de la ruta debido a que cuando se le preguntaba a los caminantes a dónde se dirigían, estos decían que iban a Las Caras.