Dos empleadas de la Vivienda Tutelada de El Casar, Maribel y Carmen, han decidido "sumar" en la lucha contra el coronavirus y, tras conocer un positivo en esta vivienda, han decidido quedarse confinadas con los residentes.

Ambas han dado el paso de quedarse "a cuidar a nuestros mayores y evitar, también, la entrada y salida de personal arriesgándonos a contagiarnos los unos a los otros", han explicado en una nota de prensa municipal.

En el caso de Carmen, que cuida a su padre dependiente, ha pedido a su hija que "se quede con él estos días y yo trato de estar en contacto con ellos todo lo que puedo", ha referido.

Mientras, Maribel ha asegurado que está decisión ha sido totalmente vocacional y que su perrita "a la que echo de menos" sabe que "estará muy bien cuidada por mi hijo".

"Todos luchamos por derrotar" al coronavirus que, actualmente, ha afectado a tres residentes, "personas que han dado todo por sus familias y lo mínimo que podemos hacer nosotras ahora es darlo todo por ellos", han coincidido Carmen y Maribel, quien han completado que "volveríamos a tomar esta decisión porque es nuestro trabajo".

Por su parte, la concejala de Bienestar Social, Olga Villanueva, ha agradecido en nombre del equipo de Gobierno "la disposición de toda la plantilla" y "su sentido de responsabilidad y su compromiso con los residentes en la vivienda".

"La situación nos ha llevado a tomar medidas excepcionales y nada de esto sería posible sin la predisposición de Maribel y Carmen y la ayuda de Noemí, del plan de Empleo, que nos ayuda a la hora de elaborar las plantillas para hacer el seguimiento del estado de salud de los residentes", ha valorado.