Reconocen cierta mejoría en Guadalajara considerada como “zona caliente”.
Juan Camacho director general de Salud Pública de CLM/ JCCM
El director general de Salud Pública, Juan Camacho, ha avisado este viernes de que Castilla-La Mancha “no está tan mal” como en la primera ola de coronavirus, “pero la situación dista mucho de ser buena”.
Así se ha mostrado Camacho en la rueda de prensa que ha ofrecido este viernes para informar sobre la evolución de la pandemia de covid-19 en la región.
Ha dicho que, en este momento, Castilla-La Mancha se encuentra “en mitad de la tabla, hacia abajo” en cuanto a incidencia acumulada en los últimos siete días y que en las últimas semanas ha habido “cierta estabilización” e, incluso, “cierta mejoría en zonas calientes”, como Talavera de la Reina o Guadalajara, pero ha insistido en que la situación “dista mucho de ser buena”.
En cualquier caso, ha destacado la importancia de esa “estabilidad” y ha hecho hincapié en que de lo que se trata es de evitar “explosiones epidémicas”.
Ha recordado que en las últimas 24 horas se han contabilizado un millar de nuevos casos y que se está explorando si esta cifra se debe a un aumento de la incidencia que se correspondería con la tendencia nacional o a los test de antígenos que han comenzado a utilizarse recientemente.
A preguntas de los periodistas, el director general de Salud Pública ha detallado que la incidencia acumulada en Castilla-La Mancha durante la semana 42 es de 181 casos por cada 100.000 habitantes y la de la semana anterior de 211, con lo que, sumadas ambas cifras, la región estaría “algo por debajo” de los 400 casos (392) por 100.000 habitantes en 14 días.
Niveles de riesgo
Camacho también se ha referido al documento "Actuaciones de respuesta coordinada para el control de la transmisión de covid-19", aprobado este jueves en el Consejo Interterritorial del Sistema Nacional de Salud (SNS), y ha explicado las similitudes y diferencias que tiene respecto al protocolo elaborado por la Consejería de Sanidad.
Entre las similitudes ha citado la manera de trabajar, en cuanto al establecimiento de indicadores, medidas y niveles adecuados a la situación de riesgo, aunque ha incidido en que el documento de aplicación en Castilla-La Mancha “se ha simplificado” y establece tres niveles, en lugar de los cuatro que recoge el documento nacional.
Si bien, ha resaltado que el texto aprobado en el Consejo Interterritorial se basa en la organización y el consenso y plantea unos mínimos comunes a las comunidades autónomas, que ahora han de ser trasladados a la realidad de cada territorio, de acuerdo a los efectos de la pandemia y a sus características sociales, económicas y geográficas.
Ha añadido que ambos “son vivos y adaptables” y que se tienen que ir revisando prácticamente cada semana porque las medidas en los diferentes niveles de riesgo pueden ser modificadas.
Toque de queda: debe estar consensuada a nivel nacional
El Director General de Salud Pública ha vuelto a reiterar la posición de Castilla-La Mancha respecto a la aplicación de una medida como el toque de queda, explicando que debe venir consensuada a nivel nacional, tal y como ya lo ha destacado el presidente regional, Emiliano García-Page.
“Tanto la herramienta jurídica como su aplicabilidad mejoran enormemente si ésta se hace a nivel nacional”, ha destacado Camacho.
En ese sentido, Camacho ha destacado que ayer mismo se aprobaron dos tipos de documentos, uno a nivel nacional que ejerce de acuerdo marco y otro de ámbito regional de actuaciones coordinadas para controlar en la medida de lo posible la incidencia de la pandemia por COVID-19.
El documento nacional es un documento marco con acuerdos mínimos sobre el que trabajar mientras que el documento autonómico se simplifica respecto a las actuaciones que se estaban llevando a cabo hasta ahora.
Si hasta ayer en Castilla-La Mancha había cinco niveles de actuación, con medidas nivel 1, medidas nivel 2, medidas nivel 3, medidas nivel Gerencia de Atención Sanitaria y medidas para poblaciones de más de 50.000 habitantes, con la nueva documentación, se simplifican y las medidas pasan a ser tres: medidas de nivel 1, medidas de nivel 2 y medidas de nivel 3.
Preguntado por las diferencias entre los dos documentos, el de nivel nacional y el de nivel regional, Camacho ha destacado que en la labor a realizar en residencias de mayores en Castilla-La Mancha “somos más estrictos”.
“No se permiten visitas, no se permiten salidas de residentes, asumiendo el coste emocional que tienen estas medidas, pero tenemos claro que cuando el virus entra en una residencia, los que gestionamos, si tenemos que equivocarnos, lo debemos hacer por el lado de la prudencia”, ha destacado el Director General de Salud Pública.
“Hemos vivido momentos de sorpresa, de desaliento, de desánimo. Hemos aprendido y entendemos la fatiga de la sociedad, que lleva 8 meses sometida a restricciones, miedos, dificultades; pero, o permanecemos vigilantes tomando cada individuo su parte de responsabilidad, o difícilmente vamos a poder con el virus”, ha concluido Camacho.
