Ya lo ha hecho otras veces en los últimos días.
Detalle de la pulsera de Page que exhibió, ayer, en el acto de Puertollano./ JCCM
No es noticia que entre políticos de otras formaciones constitucionalistas lleven pulseras o adornos en la muñeca con la bandera de España. Más infrecuente lo es, en cambio, su uso por los socialistas (entre los de Podemos o IU no digamos, que si emplean alguna es la tricolor), aunque hay excepciones. Y una de ellas es el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, y candidato a la reelección por el PSOE, Emiliano García, que en actos públicos celebrados en los últimos días se le ha visto con una pulsera cruzada por una generosa bandera de España a la que no falta ni el escudo constitucional. El último de ellos fue ayer, en Puertollano, ante medio centenar de periodistas a los que prometió que “no estaremos con los brazos cruzados” ante el desafío soberanista, “porque todos somos España y todos somos Estado”. Días antes también se le vio con esta pulsera en las fiestas medievales de la localidad toledana de Montearagón.
No es esta la primera que un presidente socialista de Castilla-La Mancha hace exhibición de banderas de España en periodos electorales. En los mítines de José Bono nunca faltó la bandera de España en el escenario y en la primera campaña de José María Barreda se dio un paso más: sus colaboradores llevaban decenas de banderas nacionales en su autobús que se repartían estrategicamente entre los simpatizantes antes de empezar cada mitin.
Todo hace pensar que García-Page va a reforzar su nunca disimulada imagen españolista en lo que queda hasta las elecciones, en una campaña en la que sus rivales le van a afear su gobierno con partidos como Podemos, que defienden el derecho de autederminación, en nuestra Constitución solo reservado al conjunto de España.