El pleno aprobará mañana dos modificaciones de crédito que tendrán "catastróficas consecuencias en el presupuesto de 2019"
Jaime Celada, izquierda, y Antonio Ruiz creen que en esta decisión hay motivos electoralista/ PP Cabanillas
El Grupo Popular del Ayuntamiento de Cabanillas del Campo ha criticado hoy al equipo de gobierno de la localidad y al alcalde, José García Salinas, que pretenden aprobar mañana en pleno, dos importantes modificaciones de crédito.
La primera, de 641.571 euros, para parques, instalaciones deportivas y contaminación lumínica. Y la segunda, de 500.000 euros, para pavimentos y pagos a la Mancomunidad Vega del Henares.
Estas dos cifras- señalan-, más los propios desajustes del Presupuesto, completan los 1.778.408,53 euros que Intervención calcula que el Consistorio tendría que dejar de ejecutar del Presupuesto para poder así cumplir con la regla de gasto. “En un Ayuntamiento cuyo Presupuesto ronda los 10 millones de euros y en el que sólo en gastos de personas se van más de 2.700.000, está claro que no podrán y que tendrán que incumplir el techo de gasto, con las catastróficas consecuencias que acarrearán para Cabanillas en su Presupuesto del próximo año”- afirman desde el PP.
Estas consecuencias se resumen en la obligatoriedad de elaborar un Plan Económico-Financiero, “lo que se traduce en la imposibilidad de aumentar la cantidad del Presupuesto y de realizar Inversiones Financieramente Sostenibles durante el año 2019”, cuenta Celada, añadiendo que “básicamente, Cabanillas no podrá crecer durante el próximo año por culpa de la nefasta gestión de Salinas y su equipo”. “Volvemos a los tiempos en los que el PSOE derrochaba el dinero de los ciudadanos sin importarle las consecuencias, esos que tanto daño hicieron a este municipio y de los que tanto nos costó recuperarnos”.
Intereses electorales
Los ‘populares’ se preguntan por qué es ahora cuando los socialistas han decidido saltarse la Ley de Estabilidad Presupuestaria. “Todo apunta a que, a un año de las próximas elecciones municipales, les han entrado las prisas para contrarrestar la manifiesta inactividad de los tres años anteriores. Parece que, como los malos estudiantes, han dejado todo para el último momento y, tratando a los vecinos por tontos, intentan tapar su falta de ganas de trabajar por Cabanillas a golpe de gasto desmedido”.