Si la extinción se produce, los acreedores no tendrán ninguna posibilidad de cobrar la deuda. Junta no es favorable a  su continuidad.

Santiago Baeza, miembro de la comisión gestora de la Cámara/ Gu Diario

La situación de la Cámara de Comercio de Guadalajara es "tremendamente problemática".

Así lo ha asegurado a Guadalajara Diario, Santiago Baeza, director provincial de Economía en Guadalajara y miembro de la comisión gestora que desde septiembre de 2015 está intentando dar una salida a esta institución.

En estos momentos la Cámara de Guadalajara tiene una deuda de cuatro millones de euros y ninguna posibilidad de hacer frente a ella ya que no cuenta con ningún activo que vender.

Según Santiago Baeza la sede de la cámara, ubicada en la calle Mayor, fue vendida por apenas un millón de euros "el 21 por ciento de su valor de tasación, que era de cuatro millones".

En septiembre de 2015, con la llegada de la actual gestora, se hizo una auditoria externa que arrojó esa abultada cifra de cuatro millones de euros y que demostró la imposiblidad de pagar a los acreedores. Ante esta situación se hizo un informe de viabilidad que es el que ha llevado a tomar la decisión de extinguir este organismo.

De momento se ha hecho la publicación en el Diario Oficial de Castilla La Mancha anunciando la extinción y ahora hay un plazo de diez días para que se presenten alegaciones "veremos qué pasa, pero si no hay ningún obstáculo el proceso seguirá adelante y se procederá a la extinción"- afirma el director provincial.

¿Qué pasa con la deuda?

Si la extinción de la Cámara se produce los acreedores no tendrán ninguna posibilidad de cobrar la deuda ya que no hay activos con los que hacerle frente. Algo distinto sería con los trabajadores que sí tendrían alguna opción aunque Baeza no ha especificado cómo podría llevarse a cabo.

Si esa extinción, bastante probable, se produce, habrá que designar qué organismos realizan la expedición de certificados de exportaciones que ahora hace la Cámara. Según Baeza es muy "prematuro" hablar de ello, pero podría pasar a ser competencia del Consejo Regional de Cámaras, lo que implicaría desplazarse a Toledo; o hacerlo a través de la Cámara de Comercio de Madrid; trámite que, según el director provincial, algunas empresas ya están realizando en la sede madrileña.