Son jóvenes que han infringido algún punto de la ordenanza de convivencia de Guadalajara

En el último curso están participando 45 menores/ Ayuntamiento Guadalajara

Romper papeleras, maltratar el mobiliario urbano, orinar o defecar en la vía pública, consumir alcohol en la calle o alterar el orden público son algunos de los supuestos que están incluídos en la Ordenanza de Convivencia de Guadalajara que se creó en su día para dar cobertura a todos esos aspectos que no estaban regulados por ley. Unas infracciones, que según esa ordenanza son castigados con una multa económica pero que pueden ser sustituidos por cursos formartivos.

Según el ayuntamiento de Guadalajara desde que en 2009 se puso en marcha esta opción, 392 menores han optado por realizar estos cursos. En el último de ellos, que se inició el día 10, están participando 45 menores.

Dicho curso consta de nueve horas lectivas repartidas en tres jornadas correspondientes a los sábados días 10, 17 y 24 de noviembre. Las materias que se imparten abarcan desde aspectos sobre como preservar la convivencia, drogodependencia, medio ambiente, seguridad vial. En la última jornada se abordan las consecuencias y efectos derivados del consumo de alcohol y se imparte un taller para los padres de los menores.