La agrupación de funcionarios asegura que cada sindicato han recibido más de 800 mil euros en dos años

La Central Sindical Independiente y de Funcionarios (CSIF) califica de inmoral la subvención directa de 860.000 euros, de carácter extraordinario, que han recibido las organizaciones sindicales CCOO y UGT, tal y como aparecía recogido ayer en el Diario Oficial de Castilla-La Mancha.

Este ayuda está vinculada al Plan Extraordinario por el Empleo 2015-2017, por el que ambos sindicatos ya recibieron 750.000 euros en 2016. En total, este Plan ha supuesto para las arcas públicas 1.610.000 euros en concepto de “difusión, seguimiento y evaluación”, 805.000 euros para cada uno de los sindicatos firmantes. Asimismo, la Confederación Regional de Empresarios de Castilla-La Mancha (Cecam) recibía 290.000 euros, a los que hay que sumar 250.000 euros ingresados el pasado año. La cuantía final de estas ayudas asciende a 2.150.000 euros.

CSIF lamenta que este tipo de 'colaboraciones' entre el Gobierno regional y sus sindicatos afines se convierta en algo habitual: en 2015 recibieron 300.000 euros para fomentar programas de asesoramiento en prevención de riesgos laborales; Cecam percibió 200.000 euros.

Unas ayudas extraordinarias que CSIF califica de inmorales e innecesarias y considera que estas subvenciones suponen un descrédito a la labor sindical que tiene que ser "independiente y transparente".

CSIF no sólo critica este tipo de estrategias, consideran, además, que el Plan Extraordinario de empleo se está mostrando ineficaz ya que está aumentando la precarización laboral. Desde este sindicato señalan que aunque en septiembre bajó el paro en Castilla-La Mancha, el 95.8 por ciento de los contratos fueron temporales, lo que evidencia el aumento y estímulo de un empleo de muy baja calidad. Además reprochan a la Junta que gaste más de dos millones de euros en difundir y evaluar el Plan cuando un 38 por ciento de la población se encuentra en riesgo de pobreza.